El cosplay es la actividad de disfrazarse como un personaje de ficción de la cultura popular. Una afición que entraña grandes dosis de creatividad. La comunidad cosplay crece por días. Los artistas de cosplay (o cosplayers en inglés) confeccionan sus propios vestidos desde cero, o compran algunas partes y crean el resto para conseguir representaciones lo más realistas posibles del personaje caracterizado. La comunidad de cosplayers suele asistir a convenciones o grandes citas donde se reúnen con otros cosplayers y entusiastas del cosplay. Lamar Tinsley, un actor y fotógrafo de cosplay de Filadelfia, comentaba que a veces encarga vestidos para sus cosplays a sastres de cosplay con más experiencia.
«No hay nada de malo en encargar vestidos porque a veces uno no tiene la destreza suficiente para confeccionar sus propios atuendos», comentaba Tinsley. «Está bien pedir ayuda a los demás. Yo no tengo ni idea de coser. A lo máximo a lo que llego es a utilizar pintura en spray y pistolas de silicona, por lo que, a veces, sí que confecciono atrezos».
Tinsley también comentaba que la comunidad cosplay suele mostrarse receptiva cuando gente nueva quiere unirse, independientemente de sus habilidades para crear vestidos desde cero.
Imagen cortesía de @sarahchucosplay (cosplay de Starlight de The Boys)
«Creo que la comunidad me ha hecho ganar confianza en mí mismo», comentaba Tinsley. «Hay gente que no se siente cómoda con su apariencia física, la forma de su cuerpo, su estatura y demás, y el apoyo de la comunidad es una fuente de motivación para uno mismo y para ganar confianza en uno mismo.»
@Sarahchucosplay, una cosplayer de 35 años de Filadelfia, comenta que acudió a su primera convención de ciencia ficción disfrazada cuando tenía unos cuatro años. Sarah cuenta con casi 32 000 seguidores en Instagram y publica sus cosplays en las redes sociales desde hace unos cinco años.
«Casi todo lo que llevo lo he tocado en cierto modo», comenta Sarah acerca de sus cosplays. «En algunos casos, por ejemplo cuando el personaje no es popular, el disfraz no existe, así que lo confecciono todo yo, de cero. Pero si se trata de un personaje conocido y ya hay un vestido de cosplay, suelo comprarlo y luego lo arreglo a mi gusto».
Sarah comenta que el proceso de creación de un cosplay, de inicio a fin, supone mucha dedicación.
Imagen cortesía de @sarahchucosplay (cosplay de Harley Quinn de DC Comics Universe)
«Cuando he elegido el personaje, suelo hacer un esbozo del diseño o busco imágenes de referencia», dice Sarah. «Así, reúno algunas imágenes de modo que se vea tanto la parte de delante, como la de detrás, los zapatos y cualquier ángulo posible. Luego dibujo el esbozo para hacerme una idea de cuánta tela voy a necesitar y dónde irá. Luego dibujo el patrón sobre papel de calco y ya continúo como con cualquier otro patrón de costura: lo coloco sobre la tela, corto, coso y plancho».
Para los miembros de la comunidad cosplay, tras todo el trabajo y el esfuerzo que ponen en sus vestidos, cuando finalmente se los ponen, no solo es gratificante, sino que, además, les permite identificarse con el personaje que están caracterizando y ponerse en su estado mental. El cosplay no solo es una forma estupenda de mejorar las dotes de costura, es también una forma de ganar confianza en uno mismo y hacer amigos, comenta Tinsley.
«A veces, [el cosplay] ayuda a combatir problemas de salud mental», comentaba Tinsley. «Te permite conocer gente y hacer amigos con personas que comparten tus mismas aficiones».